Daniela Cortez Es una de las Divas de Leonardo Ville. Estará en la Feria Exposición como azafata de Cerabol

Nunca se imaginó que sería modelo, pero cuando una vez acompañó a su madre, Claudia Laguna, a una sesión de fotos con Leonardo Ville, y este le hizo la propuesta de ser maniquí, aceptó, no sin antes consultar con sus familiares.

Desde entonces, la vida de Daniela Cortez cambió, y le gustó, pues se vio protagonizando roles glamurosos, que nunca antes se los había imaginado.
Ha participado en desfiles de modas, sesiones fotográficas y campañas publicitarias. Es la actual imagen de Cerabol, empresa de la que será azafata en la próxima Feria Exposición, por lo que está muy contenta.

Pero su vida no gira solo en torno al modelaje, también estudia. Cursa el sexto semestre de la carrera de Ingeniería Industrial y de Sistemas en la UPSA, que le ocupa la mayor parte de su tiempo, además de que es su prioridad.

Cuando no está estudiando o trabajando como modelo, le gusta salir a pasear con sus amigas y primos. “Soy bien apegada a mi familia, prefiero quedarme a charlar y compartir bonitos momentos con ellos que salir a bolichear”, comentó.

Dice que es una chica que hace los quahaceres de la casa, que es fanática del orden y la limpieza, que le gusta que todo esté en su lugar.
Reconoce que la cocina es su debilidad, que no es buena para ello, aunque prepara fetuchinis riquísimos.

Sobre la reciente visita del papa Francisco a Brasil, dijo que ha quedado gratamente sorprendida. “Es un hombre carismático, que irradia fe, que con el simple hecho de verlo y escucharlo nos llenamos de paz”, comentó.

Un hombre como Francisco le hacía falta al Vaticano, que nos hable con amor y ternura, que nos guíe en este mundo que está tan confundido, sobre a todo a los jóvenes, que necesitamos más que nadie orientación